En mi época escolar franquista se me enseñó que España era una, grande y libre. Cuando uno se hace mayor y despierta, entiende que, " Una", no era cierto, "grande", tampoco y "libre", según como se mire, tampoco.
Desde una visión latino americana por aquello de la "madre patria", no se nos entiende que se tengan tantos parlamentos, tantos presidentes autonómicos, tantos idiomas...problemas con el País Vasco, Catalunya. En fin, trasmitimos el caos como imagen de conjunto o quizás de falta de conjunto.
Pero, ¿qué es España? A mi modo de ver, " España es una nación de naciones sin libertad". Sumado a un descontento creciente y no sin razón del País Vasco y de la Nación Catalana. Ambos países tienen formas diferentes de canalizar la soberanía. Pero que cada día se suman mas adeptos a luchar por la libertad de su bandera, de su lengua, y de su cultura en base al continuo rechazo dispensado con esperpentos ataques desde todos los medios de comunicación y desde el propio estado español, que representa el conjunto de los españoles, sean del signo que sea en clave política.
Yo soy catalán, nací en este pequeño país que se sitúa en las aguas del Mediterráneo, cuyos habitantes son gente amable, abierta, trabajadora, gente tranquila y pacífica, gente que pacta y cumple sus compromisos. Un pequeño país de 32.000 km2 con una población de 7.millones de habitantes. Con una cultura propia y un modo de ver y hacer las cosas propias. Un país abierto a los inmigrantes, un país que busca situarse en el concierto de las naciones libres, con una cultura a veces mas próxima a la europea que a la misma España. Un país que respeta las ideas. Un país dialogante y respetuoso.
Un pequeño país que ha dado al mundo, músicos, pintores, arquitectos... de renombre universal y en todas las ramas del saber. Una nación luchadora y responsable de su destino.
Es una pequeña nación orgullosa de su manera de ser. Una nación comprendida por el mundo exterior, pero incomprendida y demasiadas veces odiada por sus vecinos de la "España", que no aceptan una Catalunya diferente, un idioma diferente, una cultura diferente y una forma de ver las cosas diferentes. A Catalunya se la ha despreciado, se la insultado, se ha menospreciado en sus presidentes, apoyado siempre por las intituciones del gobierno español y el poder de los medios de comunicación.
Se hace boicot de los productos catalanes como un país extranjero se tratara. Así llegaríamos con un tema amplio, pasando por la "Cataluya insolidaria" que siempre sale a relucir cuando se trata de ampliar sus competencias o bien cuando se exige su cumplimiento. Pero nadie dice nada del expolio que durante siglos han ejercido y se continua ejerciendo los diversos gobiernos de la España de naciones.
España, la España actual lo tiene mal si no ofrece un giro completo de su visión partidista y deboradora de impuestos que mal canaliza después.
Así lo vemos en lo concerniente a los trenes de alta velocidad, que todo se hunde porque está pogramado desde las altas instancias de un despacho de Madrid, o en un bar de tapeo. O se funden las eléctricas.. y otras tantas cosas que tiene que sufrir el ciudadano catalán en silencio pues su queja puede ser respondida de inmediato como "victimista", "insolidario", etc.
España lo tiene mal si actúa trasmitiendo mensajes negativos con mente imperialista a un país noble como es Catalunya, porque los ciudadanos catalanes, cualquier día, se levantaran y optaran por otras formas de convivencia y de relación con la vecina España, pasando de primos a cuñados, pues el papel de primo, Catalunya ya está harta.
Me gustaría una Catalunya libre de peajes en autopistas, como la tiene la España solidaria, unos trenes que atraviesen Europa y no para sólo para llegar a Madrid. Una España moderna, sin complejos, con unas naciones libres e independientes en todos sus términos y de buena vecindad y respeto mutuo. "Una federación de estados libres", Con plena y auténtica soberanía en su administración, en su lengua, en su educación, en su cultura, en su trabajo, en su bandera, en su economía, en su libertad...en su respeto.
La posición de España en el siglo XXI es de convertirse de la "España de naciones sin libertad", en la "España de naciones libres."
Ha de terminar la presión mediática contra Catalunya, ha de terminar el continuo desprecio hacia todo lo que es catalán, antes que la "Nación Catalana", busque otros cauces de convivencia y de libertad, con una España que no ha sabido amoldarse a los tiempos de un mundo nuevo.
España no puede seguir expoliando la nación catalana desde los tiempos de Felipe V, que abolió las libertades catalanas. Catalunya necesita con urgencia un nuevo tratado con sus vecinos que no se basen en la explotación, en el insulto y en la descalificación, en el desprecio y en el abuso económico. ¡¡Ya está bien!!
España no puede seguir expoliando la nación catalana desde los tiempos de Felipe V, que abolió las libertades catalanas. Catalunya necesita con urgencia un nuevo tratado con sus vecinos que no se basen en la explotación, en el insulto y en la descalificación, en el desprecio y en el abuso económico. ¡¡Ya está bien!!
Hay que considerar que la España moderna pasa por una Confederación de Estados plurinacionales, sin que nadie deba escandilizarse, o bien la independencia será la meta exigible a cambio de nada.
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