viernes, 20 de noviembre de 2009

AMAR Y SER AMADO


AMAR SER AMADO

Querido Jordi, el resumen de la vida está en esta sencilla frase de “ Amar y ser Amado”, Tan simple y tan complicado como todo lo que hacemos en la vida. Una frase que lo envuelve todo: pasiones, trabajo, matrimonio, dinero, amistad, rencor, odio... todo está bajo el contexto primario de “Amar y ser amado” Por ello uno llega al matrimonio o forma pareja, tiene hijos, trabaja por y para la familia, por y para los hijos, pero la piedra angular no son los hijos, es la pareja. Un hombre y una mujer.

Un hombre y una mujer, con vidas anteriores, con una pasado y con un futuro por delante, unas ambiciones, unos proyectos en base común y de respeto, de ilusión, de lucha. Un hombre y una mujer con diferentes valores y apreciaciones de la vida. Con diferentes opiniones y valoraciones a los hechos, a las circunstancias, a las costumbres, a la moral. Tan dispares como la vida misma y sin embargo existe un proyecto común de objetivos e ilusión, de confianza simplemente porque un día nos damos cuenta que lo más importante en la vida es “Amar y ser amado”

En este trayecto de pareja, de “Amar y ser amado”, existen unos complementos de alto valor: El diálogo y los valores morales. Las dos son los pilares de todo matrimonio o de la pareja. Si falta uno de ellos, la pareja está contaminada al fracaso.

El diálogo es el quita fantasmas y conocimiento de toda pareja. Aquí e establece los miedos, los malos entendidos, el respeto el amor, el conocimiento del sexo opuesto, los deseos. Si quitamos el diálogo de cualquier pareja dejará de existir tarde o temprano. El dialogo allana a la pareja fortalece la relación, da confianza entre ellos. Es el acompañamiento en las horas difíciles y el compartir las penas y alegrías. Es la quita de los egoísmos personales, es el saber y ponerse en el lugar del otro. Es el apoyo incondicional, Si hay un buen diálogo no habrá rupturas y desengaños y se erradicaría el egoísmo que todos llevamos dentro. El conocimiento de las personas sobre la base del diálogo evitaría que gran parte de las mujeres maltratadas (y hombres); tuvieran un conocimiento más completa del sexo opuesto, se sabría que el perfil no corresponde con nuestras perspectivas por su agresividad, por sus inclinaciones a las drogas o el alcohol, a la promiscuidad, a la vagancia, al dinero fácil y al corre, a afrontar las dificultades, a la constancia...

El segundo pilar lo forman los valores morales. El concepto familia, la educación, las buenas costumbres, el criterio responsable frente a la vida y los que nos rodean. La actitud de lucha frente a los avatares de la vida.

Hoy, las parejas se forman sin ningún tipo de responsabilidad, con o sin hijos. La flojedad en los criterios, la falta de personalidad, El quererlo todo, imperando sólo los egoísmos. Nadie quiere saber nada de sacrificios, nadie quiere saber nada de responsabilidades. Solo se habla de derechos, pero no de obligaciones. Nadie soporta nada de nadie, se cambia de marido o de esposa como quien compra una entrada de cine; ni se aguanta, ni se escucha y si, se habla siempre de dinero. De lo que a uno le pertenece. Lo que es de uno y no del otro. Lo que me pertenece, lo que es mío. Hoy existe la hipocresía del amor. Hoy te amo, mañana ya veré. Es tan frágil...

No creo en el flechazo, el amor que todo lo desbanca, el amor de nuestra vida.

El amor que yo creo, es el que se construye día a día, con sus altos y bajos, con sus alegrías y sus penas. El amor es el que siempre florece, el del buen carácter frente a la adversidad, el de una sonrisa por la mañana, es el del apoyo frente a nuestros desánimos, es el del roce inconsciente, es el del beso suave, el de la ternura, el del respeto, el de la lujuria compartida, el del paseo por la orilla, el del compartir los quehaceres de la casa, el del abrazo, el del cine oscuro, en el roce de los cuerpos, en el apoyo frente a la enfermedad, es el del beso a la frente, es el calor de una cama con los pies gélidos, es la mirada comprometida, es la sensualidad esporádica, es el querer de la arruga de nuestro rostro que sale por la mañana, es el de nuestros cabellos alborotados, es el de la elegancia, el desenfreno, el suspiro, la ilusión, el silencio, el de unos zapatos nuevos, el de una flor en trémulas manos, es el de la igualdad, es el de aquellos kilos que nos sobran, es el de aquellos kilos que nos faltan, es el amor construido con el sentimiento y no en el abandono, es el de la perpetuidad frente al cambio.

La mujer, en este trayecto está perdiendo atractivo frente al varón, frente a la responsabilidad y está abandonando su parcela natural del sentido de esposa responsable, de madre y de mujer. Olvidando que lo más importante en la vida es Amar y ser amado. Y hacer un trayecto junto al ser querido cogidos de la mano, bajo el dialogo y los valores morales.

2 comentarios:

Lembranza dijo...

Amar y ser amado, eso es lo que todos queremos. soy una mujer, que no ha olvidado la esencia de mujer, que ha dado demasiado para no recibir nada, quiza si, reproches. No creo que la mujer haya abandonado nada, quiza es un poco más egoista y también piense en ella,aunque realmente no es ser egoista, es intentar ser ella misma, sin la presion de una cultura en la que te dice que tu eres la que debes sacrificarte, que tu tienes deberes.Sacrificios por parte ambos, sino hay, da igual quien sea, hombre o mujer, todo se viene abajo. Durante años me he sacrificado por mis hijas por mi marido, por ser un poco de todo, y al final me di cuenta de que no era yo, todo el mundo hacia su vida y yo me sentia prisionera y lo peor es que no sabia con salir, no veia ninguna puerta por la que escapar.
Espero que estes bien, Un abrazo

Lembranza dijo...

Por cierto, me ha gustado mucho tu entrada, cierto queme ha picado un poco lo que has puesto de la mujer, pero de acuerdo en todo lo demás. Amor, amistad y sobretodo respeto. Resaludo