AYUNTAMIENTOS
Por fin el excelentísimo ayuntamiento del que no deseo dar su identidad al que pertenezco, se ha dignado a pagar un cuarenta por ciento de la deuda que tiene conmigo. Lo suficiente para poder pagar el billete de mi familia y poder traerlos a España, poder abrazar a mi esposa y a mi hijo.
Me ha costado mes y medio durmiendo en las escaleras del ayuntamiento para que me escucharan. He pasado frío, calor y lluvia por y para mi familia. Hubiera resistido una vida entera por conseguir la unión de mi familia. Es lo único que tengo, es lo que más valor tiene. Es lo que más quiero. Es lo que amo. Es lo que forma parte prioritaria en mi vida: La Familia
No sé que sucede, con los políticos, no voy a decir todos, pero sí muchos de ellos y algún que otro funcionario. En cuanto obtienen su sillón se vuelven déspotas, prepotentes con el ciudadano y parece ser, para ellos, que el ciudadano tiene que estar implorando para ser atendido. Quizás me equivoque, pero siempre pensé que los funcionarios públicos y políticos deben estar al servicio del ciudadano y no al revés.
La realidad es muy distinta. Los ayuntamientos se han convertido en un coto privado de unos señores que carecen de escrúpulos y solo les interesa el dinero fácil.
En mi población el alcalde tuvo que comprar los votos que le faltaban para obtener la alcaldía, esto, entre otros favores, para cumplir sus ambiciones políticas. Estos favores, solo comento uno, nos cuesta pagar un salario a su, antes contrincante político –doce mil €uros mensuales- de sueldo, a un señor, que nada hace y que casi nadie conoce, pero aparece a final de mes para cobrar su nómina y que entre todos los ciudadanos pagamos. Un alcalde que cuando lo necesitamos se esconde como las cucarachas cuando uno da la luz.
Hay un paralelismo en los políticos de las pequeñas poblaciones con la de las grandes ciudades. Todos pierden la cola para hacerse la foto con el político del escalafón superior y todos desean hacer obras, obras y más obras; Es un inusitado interés para poder cobrar comisiones y la conseguida foto. Esto da mas que atender a un ciudadano, aunque este duerma en la calle para ser escuchado.
Muchos de estos alcaldes tienen varios sueldos en otros puestos, conseguidos desde la alcaldía. También tiene a sus familiares bien protegidos, en fin, sin comentarios.
Tendrían que regularizar los salarios para estos políticos de tercera, también los de primera. Dar un sueldo de mil quinientos €ruros mensuales y dejarían paso a gente de valía. Controlar los ayuntamientos los desaguisados en los departamentos de obras que es el departamento de mas fluido de intereses convergen y de comisiones; el de los actos culturales y festivos... bueno, que todos los departamentos tendrían que ser ampliamente controlados para detener los vividores que se sirven de sus cargos para apoltronarse en el dinero y dejar paso a gente de valía, de honrados que estoy seguro que los hay.
Estos desperfectos económicos o de intereses personales deberían estar muy censurados judicialmente. Me refiero a una población de unos doce mil habitantes, si esto lo trasladamos a toda la nación, comprobaremos que la sangría que tiene el país es peor que el vertido petrolífero del golfo de México.
La ética y la moral no funcionan en ningún pueblo o ciudad de España. El atraco es la norma en la política. No hay jueces suficientes, ni fiscales, que puedan detener esta hemorragia, ni siquiera, quizás, les interesa el tema. Así nos va. Pero hay que luchar día a día para evitar que esto ocurra. Indiscutiblemente hay funcionarios honrados, pero están rodeados de tiburones.
Por fin el excelentísimo ayuntamiento del que no deseo dar su identidad al que pertenezco, se ha dignado a pagar un cuarenta por ciento de la deuda que tiene conmigo. Lo suficiente para poder pagar el billete de mi familia y poder traerlos a España, poder abrazar a mi esposa y a mi hijo.
Me ha costado mes y medio durmiendo en las escaleras del ayuntamiento para que me escucharan. He pasado frío, calor y lluvia por y para mi familia. Hubiera resistido una vida entera por conseguir la unión de mi familia. Es lo único que tengo, es lo que más valor tiene. Es lo que más quiero. Es lo que amo. Es lo que forma parte prioritaria en mi vida: La Familia
No sé que sucede, con los políticos, no voy a decir todos, pero sí muchos de ellos y algún que otro funcionario. En cuanto obtienen su sillón se vuelven déspotas, prepotentes con el ciudadano y parece ser, para ellos, que el ciudadano tiene que estar implorando para ser atendido. Quizás me equivoque, pero siempre pensé que los funcionarios públicos y políticos deben estar al servicio del ciudadano y no al revés.
La realidad es muy distinta. Los ayuntamientos se han convertido en un coto privado de unos señores que carecen de escrúpulos y solo les interesa el dinero fácil.
En mi población el alcalde tuvo que comprar los votos que le faltaban para obtener la alcaldía, esto, entre otros favores, para cumplir sus ambiciones políticas. Estos favores, solo comento uno, nos cuesta pagar un salario a su, antes contrincante político –doce mil €uros mensuales- de sueldo, a un señor, que nada hace y que casi nadie conoce, pero aparece a final de mes para cobrar su nómina y que entre todos los ciudadanos pagamos. Un alcalde que cuando lo necesitamos se esconde como las cucarachas cuando uno da la luz.
Hay un paralelismo en los políticos de las pequeñas poblaciones con la de las grandes ciudades. Todos pierden la cola para hacerse la foto con el político del escalafón superior y todos desean hacer obras, obras y más obras; Es un inusitado interés para poder cobrar comisiones y la conseguida foto. Esto da mas que atender a un ciudadano, aunque este duerma en la calle para ser escuchado.
Muchos de estos alcaldes tienen varios sueldos en otros puestos, conseguidos desde la alcaldía. También tiene a sus familiares bien protegidos, en fin, sin comentarios.
Tendrían que regularizar los salarios para estos políticos de tercera, también los de primera. Dar un sueldo de mil quinientos €ruros mensuales y dejarían paso a gente de valía. Controlar los ayuntamientos los desaguisados en los departamentos de obras que es el departamento de mas fluido de intereses convergen y de comisiones; el de los actos culturales y festivos... bueno, que todos los departamentos tendrían que ser ampliamente controlados para detener los vividores que se sirven de sus cargos para apoltronarse en el dinero y dejar paso a gente de valía, de honrados que estoy seguro que los hay.
Estos desperfectos económicos o de intereses personales deberían estar muy censurados judicialmente. Me refiero a una población de unos doce mil habitantes, si esto lo trasladamos a toda la nación, comprobaremos que la sangría que tiene el país es peor que el vertido petrolífero del golfo de México.
La ética y la moral no funcionan en ningún pueblo o ciudad de España. El atraco es la norma en la política. No hay jueces suficientes, ni fiscales, que puedan detener esta hemorragia, ni siquiera, quizás, les interesa el tema. Así nos va. Pero hay que luchar día a día para evitar que esto ocurra. Indiscutiblemente hay funcionarios honrados, pero están rodeados de tiburones.
2 comentarios:
La política en España es (como casi todo en este país) un negocio. Muy poca gente queda ya que se plantee dedicarse a la política si no es para hacer dinero.
A los pocos que pretenden ser honrados no se les deja escalar, no vaya a ser que les corte el grifo a los demás.
Claro que los políticos deberían estar al servicio del ciudadano, pero nos olvidamos que aquí hay un poder mucho más grande que todo lo puede y todo lo justifica: el dinero.
Un abrazo
Ehse
Lo único bueno de los políticos es la cantidad de motivos que nos dan para escribir XDDD
Un saludo
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