sábado, 4 de julio de 2009

DENUNCIAS FALSAS DE MALTRATO




¿Que hacen los jueces y fiscales con las denuncias falsas?

La mayoría de las veces no hacen nada. El ciudadano queda y está desprotegido. En el caso de que quede demostrado la inocencia del acusado que ya es mucho suponer, nos encontramos frente a un vació legal práctico.

Esto repercute en los casos de separación donde entre otras armas arrojadizas, hay el desprecio y la inmoralidad de acusar al cónyuge de falsos maltratos sean hacia el esposo /a o hacia los hijos. O de uno de los hijos contra uno de sus padres. A veces se actúa por revancha y en otras, que siempre está de fondo, por cuestiones económicas.

La sociedad sabe que los juzgados obran por derecho de inercia a favor de la mujer. Unos lo hacen por snobismo para demostrar un talante liberal frente a la sociedad y otros frente a sus compañeros de la jurisprudencia. Unos y otros se respaldan, después de tomar al medio día un café que todo lo cura. Los jueces y fiscales no quieren ser tachados de insensibilidad frente a la mujer y las fiscales y juezas están con las garras bien afiladas. Con estos conceptos de falsa justicia en la que no deben existir discriminaciones de sexo, ni de raza, ni... resulta que las hay, por lo cual la justicia deja de ser justicia dejando un amplio campo a la imaginación de que por parte de uno de los cónyuges esta motivado y dispuesto a realizar los juramentos precisos para indicar que su cónyuge la ha maltratado, sorteando de este modo las frágiles barreras de la credibilidad de cualquier juez y en consecuencia tendrá los fiscales a lado de la mentira, sin importar el daño, en caso de estar equivocado, que se hace a la persona imputada.

En los casos que yo conozco y además, sufrido directamente, se da la circunstancia, que la mentira o la falsa denuncia, queda libre de toda amonestación jurídica. No será comprobado, ni investigado las motivaciones reales por las que una persona, que incluso se ha reafirmado, dice que es objeto de maltrato, cuando en realidad, nunca lo ha sido y a veces, sí, en términos inequívocos, al revés.

Las graves consecuencias, de por vida, a una persona, sobre todo de índole moral, que se ve expuesta a una denuncia de malos tratos y sus señorías le declaran inocente, la denuncia queda archivada, en vez de anularla. Cualquier cosa que le suceda a este individuo a lo largo de su vida, la justicia le recordará que es un maltratador en potencia y muy peligroso. Así es realmente la justicia. Nunca le absolvió, como bien dice, solo quedó archivada. ¿Para que sirven los jueces y fiscales? Para esto, para tomar un café.

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