jueves, 15 de julio de 2010

AYUNTAMIENTOS




AYUNTAMIENTOS

Por fin el excelentísimo ayuntamiento del que no deseo dar su identidad al que pertenezco, se ha dignado a pagar un cuarenta por ciento de la deuda que tiene conmigo. Lo suficiente para poder pagar el billete de mi familia y poder traerlos a España, poder abrazar a mi esposa y a mi hijo.

Me ha costado mes y medio durmiendo en las escaleras del ayuntamiento para que me escucharan. He pasado frío, calor y lluvia por y para mi familia. Hubiera resistido una vida entera por conseguir la unión de mi familia. Es lo único que tengo, es lo que más valor tiene. Es lo que más quiero. Es lo que amo. Es lo que forma parte prioritaria en mi vida: La Familia

No sé que sucede, con los políticos, no voy a decir todos, pero sí muchos de ellos y algún que otro funcionario. En cuanto obtienen su sillón se vuelven déspotas, prepotentes con el ciudadano y parece ser, para ellos, que el ciudadano tiene que estar implorando para ser atendido. Quizás me equivoque, pero siempre pensé que los funcionarios públicos y políticos deben estar al servicio del ciudadano y no al revés.

La realidad es muy distinta. Los ayuntamientos se han convertido en un coto privado de unos señores que carecen de escrúpulos y solo les interesa el dinero fácil.

En mi población el alcalde tuvo que comprar los votos que le faltaban para obtener la alcaldía, esto, entre otros favores, para cumplir sus ambiciones políticas. Estos favores, solo comento uno, nos cuesta pagar un salario a su, antes contrincante político –doce mil €uros mensuales- de sueldo, a un señor, que nada hace y que casi nadie conoce, pero aparece a final de mes para cobrar su nómina y que entre todos los ciudadanos pagamos. Un alcalde que cuando lo necesitamos se esconde como las cucarachas cuando uno da la luz.

Hay un paralelismo en los políticos de las pequeñas poblaciones con la de las grandes ciudades. Todos pierden la cola para hacerse la foto con el político del escalafón superior y todos desean hacer obras, obras y más obras; Es un inusitado interés para poder cobrar comisiones y la conseguida foto. Esto da mas que atender a un ciudadano, aunque este duerma en la calle para ser escuchado.

Muchos de estos alcaldes tienen varios sueldos en otros puestos, conseguidos desde la alcaldía. También tiene a sus familiares bien protegidos, en fin, sin comentarios.

Tendrían que regularizar los salarios para estos políticos de tercera, también los de primera. Dar un sueldo de mil quinientos €ruros mensuales y dejarían paso a gente de valía. Controlar los ayuntamientos los desaguisados en los departamentos de obras que es el departamento de mas fluido de intereses convergen y de comisiones; el de los actos culturales y festivos... bueno, que todos los departamentos tendrían que ser ampliamente controlados para detener los vividores que se sirven de sus cargos para apoltronarse en el dinero y dejar paso a gente de valía, de honrados que estoy seguro que los hay.

Estos desperfectos económicos o de intereses personales deberían estar muy censurados judicialmente. Me refiero a una población de unos doce mil habitantes, si esto lo trasladamos a toda la nación, comprobaremos que la sangría que tiene el país es peor que el vertido petrolífero del golfo de México.

La ética y la moral no funcionan en ningún pueblo o ciudad de España. El atraco es la norma en la política. No hay jueces suficientes, ni fiscales, que puedan detener esta hemorragia, ni siquiera, quizás, les interesa el tema. Así nos va. Pero hay que luchar día a día para evitar que esto ocurra. Indiscutiblemente hay funcionarios honrados, pero están rodeados de tiburones.

miércoles, 14 de julio de 2010

EL MUNDO DE LAS IDEAS






El MUNDO DE LAS IDEAS


Vivimos en una sociedad de falta de valores y de confusionismo. Todo es aceptable, todo es posible; ya no cuentan los valores que engrandece al ser humano. La sociedad está, esterilizada mentalmente por los gobiernos y los grandes poderes económicos que dirigen el mundo.

Se vive o se sobrevive con falsas ilusiones de futuro. Se potencia los egoísmos individuales y colectivos. Se nos vende un mundo perfecto en el que todo es posible y alcanzable. Y que por consiguiente todo el mundo tiene derecho a ello. Sin embargo, solo los que carecen de escrúpulos lo consiguen.

La falta de conciencia en el mundo material llega al mundo de las ideas, al mundo de los conceptos, al mundo de las libertades minoritarias.

Falsas propagandas, nos venden este futuro que jamás alcanzaremos la mayoría de los seres humanos. Los fuertes impactos del marketing nos venden un mundo perfecto, un hombre perfecto, una mujer perfecta. “Consuma esto y será feliz. Cambie a otro auto y será envidiado. Compre esta casa para su familia porque se merecen lo mejor. Deles un capricho, adquiriendo este televisor de plasma. No sea el último en adquirir un móvil de quinta generación. Póngase al día con un ordenador marca... Compre esta alhaja para demostrar su amor a su mujer... Sea un buen padre comprando a sus hijos una motocicleta.

En fin, el hombre va adquiriendo toda una serie de cachivaches inútiles a cambio de destrozarse los nervios y una vida alocada de trabajo. Se le bombardea continuamente con espejismos y se le manipula según los intereses del mercado.

A las mujeres se les ofrece un canon de belleza inalcanzable y lleno de torturas... Se las hace ver que solo existen unas medidas perfectas, un busto perfecto, un cutis de bebé.

No nos damos cuenta, que tener un auto más potente, no nos cubre de felicidad, Que disponer de una casa más grande, no es el paraíso; ni por un velero, ni por tener tres televisores de plasma, ni por unos zapatos italianos, ni disponer de diez cuentas corrientes.

También en el mundo de las ideas y de los conceptos se nos hace aceptar una inmoralidad vestida de racionalidad. Se deben aceptar falsos raciocinios para no caer en conceptos arcaicos del pensamiento. Su estructura está basada en la defensa de los más débiles y grupos minoritarios. Algo que muy bien saben los políticos de rentabilizar.

No se entra en un mundo perfecto, ofreciendo una falsa intelectualidad de grandeza de miras, aceptando una moral de apariencia progresista, cuando es lo contrario. Uno no debe aceptar el matrimonio de lesbianas o de homosexuales, incluyendo su derecho a tener hijos adoptivos. que si bien merecen todos los respetos, no hay que caer en la pantomima de un falso modernismo extremista. No se debe confundir el derecho con el respeto.

Las libertades, si bien es un bien a proteger; los extremos, pueden llegar a un sentido kafkaiano y esperpéntico, en una sociedad que confunde la libertad con la implantación de derechos contra natura.

Dos visionarios han descrito con mucha realidad, el presente y futuro de la humanidad.

Julio Verne, nos describe lo que el hombre es capaz de realizar. Sus propios sueños se convierten en realidad. No hay meta que no pueda conquistar el hombre. Es un futuro de ilusión que el hombre ha convertido en realidad y que a todos nos une.

El escritor Aldous Huxley vaticina un mundo perfecto. Un mundo sin libertad. Un mundo de esclavos. Un mundo programado por la ciencia y el poder.

Entre ambos mundos es preferible el de Julio Verne. De un modo u otro nos lleva a la infancia, a la ilusión, a la superación.

El árbol de la ciencia, con el estudio de los genomas y otros adelantos científicos, nos ofrece a la carta, las características de nuestro futuro bebé. Todo es cuestión de dinero. Como si se tratara de una mercancía. Es el mundo de Aldous Huxley. La perfección sin libertad, la dictadura del pensamiento.

El hombre tiene la necesidad urgente de recuperar los valores morales y éticos. Sin ellos, el progreso se convierte en una dictadura del pensamiento y la abolición de todas las libertades y entraríamos al lúgubre mundo de Aldous Huxley.